Todo comenzó el Lunes 7 cuando salí con Tart dispuesto a subir la cuesta del burro, bajarla y no hincar el pico.
La cuestión fue que antes de empezar la vuelta vimos esto:
Y se nos antojó bajarlo.
Así que hoy nos presentamos servidor, Duente (sin tarta, posiblemente se la comió por el camino) y Tart a las 10:30 preparados para la acción.
Comenzamos la ruta con dando un verdeo por el pueblo. Para ir enfilándonos a Fuente luna donde Tart paró a llenar como siempre ¿Un grifo pa ese tío? Tras un breve mariconeo empezamos a bajar la cuesta done Pedro Jesús hinco pico y la cuesta del Kiko con su charca (si, todas las cuestas, curvas, desniveles, accidentes geográficos, carriles, árboles, piedras TODO tiene nombre).
Hasta aquí llegamos todos intactos e impolutos a pesar de que Duende iba mariconeando con todo lo que se movía. La ruta siguió cruzando
EL SANTO ARROYO hasta llegar a la mundialmente conocida cuesta del burro, la cual despachamos bien prontito a pesar de que hoy Tart había comido lengua y cada vez que parábamos había que meterle un calcetín en la boca para que se callara y siguiese pedaleando.
Finalmente llegamos a nuestro destino donde se produjo un ligero cambio. Ya que estábamos allí porque conformarnos con subir donde teníamos previsto si podíamos subir más troneras y bajar más todavía.
Así que manos a la obra o automáticos a sus calas en el caso de Duende... Para abandonarlos a los dos minutos ya que lo que teníamos en frente era una PUTA PARED QUE NO HABÍA COJONES DE SUBIR NI ANDANDO.
Para muestra un botón.
A pesar de todo llegamos hasta arriba, arrastrándonos pero bueno lo importante es participar ¿o no?
Una vez en la cima nos entretuvimos en lo que se puede entretener cualquier persona normal en un día de bicicleta. Por ejemplo hacerle fotos artísticas a Tart.
Tart con su maillot tipo camiseta interior
Poser gayer?
No os hagais como que estais sorprendidos que el calvo se veía de venir.
Duende enviando un sms a casa "Todavía no me he caido, pero sigue alerta y si te doy un toque llama al 061 que llevo automáticos"
Las bicis.
Después de todo este mariconeo venía lo divertido que era bajar lo que nos había costado sangre, sudor y lágrimas subir. Y bien divertido que fue: troneras, tierra suelta, cajorros, más troneras, un poco de barro, campo a través y para finalizar una tela metálica que cruzar. Todo ello cuesta abajo. Una ruta 100% Destroyer y recomendable. Por poner una pega... los hincapicos que no se produjeron pero es cuestión de repetir y ya caerá alguien <_<
Para finalizar la ruta tuvimos un poco de mecánica cortesía de Tart donde me diagnóstico una holgura en el equilibrin y vuelta por la carretera que no nos hemos metido a carreteros pero a mi al menos me dolían ya hasta los sentimientos.
Ea para la próxima a ver si alguien se apunta.
:hola: