<!--sizeo:3--><span style="font-size:12pt;line-height:100%"><!--/sizeo--><!--coloro:#3366ff--><span style="color:#3366ff"><!--/coloro-->Aaron Fotheringham<!--colorc--></span><!--/colorc--><!--sizec--></span><!--/sizec--> es uno de los pocos 'skater en silla de ruedas' que existen en el mundo (o '
<!--coloro:#2e5f97--><span style="color:#2e5f97"><!--/coloro-->Hardcore Sitter<!--colorc--></span><!--/colorc-->
', como él prefiere llamarse y que sería algo así como 'Sentado al límite'). Al igual que este joven procedente de Las Vegas, muchos skaters discapacitados intentan hacer con sus sillas lo que otros hacen con sus monopatines: saltos espectaculares y toda clase de trucos y virguerías.
Pero con tan sólo 14 años, Aaron ha logrado lo que nadie antes ha podido hacer: después de conseguir el año pasado un espectacular salto con giro de 180º, ahora, se ha convertido en la primera persona en la historia en completar un 'Back Flip' (360º) en silla de ruedas.
En una entrevista reciente en
<!--coloro:#2e5f97--><span style="color:#2e5f97"><!--/coloro-->NewDisability.com<!--colorc--></span><!--/colorc-->
, el joven cuenta que antes de intentar la maniobra en las rampas, la realizó 50 ó 60 veces en una especie de piscina de cojines, para amortiguar las caídas. Tras unos 15 intentos frustrados y alguna que otra caída, consiguió completar el salto con éxito. "Sentí que se cumplía algo que siempre había querido", afirma el americano. Desde entonces, la ha ejecutado unas 25 veces sin problemas.
Hazañas como ésta no han resultado fáciles para Fotheringham, ya que en los últimos años le han costado un codo roto además de bastantes golpes y moratones.
Cuando le preguntan sobre las horas que dedica a entrenar, Aaron responde: "Yo no lo considero un entrenamiento, para mi es simplemente una manera divertida de vivir mi vida".
Aaron está en silla de ruedas desde los 8 años, cuando tras tres operaciones de cadera que finalmente no funcionaron, tuvo que olvidarse de sus muletas y usar permanentemente una silla. Aunque fue a los seis años cuando, al ver a su hermano mayor que practicaba con la bicileta, el joven americano se inició en este deporte de indudable riesgo.
Fotheringham define el Hard Core Sitting como "un término que inventé para los deportes extremos en silla de ruedas", comenta. Y cuando le preguntan qué le diría a cualquiera que desease practicar este deporte Aaron responde: "que se ponga un casco".